Por: Marcela Zuluaga – octubre 17 de 2014
El 16 de octubre se realizó la primera jornada de movilización nacional convocada este año por la Mesa Amplia Nacional Estudiantil (MANE). En Bogotá, las marchas contaron con la presencia de más de 3.000 estudiantes de las universidades Distrital, Pedagógica, Nacional, Javeriana y De La Salle, contando con la participación del Sindicato de Trabajadores de la Universidad Pedagógica (Sintraupn) y la Asociación Colombiana de actores (ASCA).
La MANE convocó a esta jornada de movilización en rechazo al apoyo del gobierno al “Acuerdo por lo superior 2034”, propuesta de reforma educativa presentada por el Consejo Nacional de Educación Superior (CESU), y reclaman que se instale una mesa de concertación como escenario para la construcción de una propuesta para la educación superior que garantice los derechos de la mayoría de la población y que se haga de cara al país. Adicionalmente, los universitarios reclaman al Ejecutivo establecer un plan de pago del déficit de $12,5 billones que tiene con la educación pública.
Para los universitarios, tanto la propuesta de reforma educativa presentada hace tres años por el gobierno y hundida en el Congreso tras las protestas de más de un millón de estudiantes como la que se pretende imponer con el “Acuerdo por lo superior 2034” responden a los intereses de poner las universidades al servicio de los intereses económicos dominantes y no de asegurar una formación de calidad como derecho para la mayoría de los colombianos. Al respecto, Sergio Fernández, vocero nacional de la MANE señaló que “la educación es una condición necesaria para el desarrollo de cualquier sociedad y el modelo de educación que se ha impuesto es al servicio a un modelo de país que se concentra en la extracción y explotación de bienes”.
En el mismo sentido, Natalia Pava, integrante de la Federación Universitaria Nacional (FUN-Comisiones), explicó que “luego de que en los últimos años el presupuesto de las universidades ha sido recortado, los estudiantes tomamos la decisión de protestar frente a un ‘Acuerdo por lo superior’ que, a la luz de los estudiantes, es otra iniciativa que se hace sin tener en cuenta su voz y que, en cambio, crece en el detrimento de la calidad, la soberanía y la autonomía universitaria”. Además, denunció que las medias propuestas por el gobierno están enmarcadas en unas recomendaciones de la Organización para La Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) que buscan hacer a Colombia más atractiva para la inversión de los grandes monopolios internacionales y no mejorar la calidad educativa.
De otro lado, los trabajadores universitarios que se integraron a la protesta denunciaron que las universidades públicas se encuentran con graves problemas debido al déficit de financiamiento. David Castillo, presidente de Sintraupn, manifestó que “la universidad [Pedagógica] tiene problemas en sus tres principales plantas, tiene tercerización en cada una de ellas […] necesitamos más gente para poder atender la gran población que tenemos en este momento y el Gobierno Nacional no gira los recursos necesarios […] nos faltan muchos recursos para poder ofrecer una educación de calidad”.
Por su parte, la ministra de Educación, Gina Parody, se ha declarado “permanentemente abierta” al diálogo, pero señaló que “hay que hacer: no nos podemos quedar en el debate, aunque el debate se mantenga”, insistiendo en que lo fundamental del problema educativo del país es la financiación de la oferta y, especialmente, de la demanda, asunto que los estudiantes han denunciado como una forma de privatización a través del crédito que sólo beneficiaría a los bancos y dejaría el derecho a la educación en manos de quienes puedan pagarlo, y que motivó el enorme movimiento de hace tres años que terminó hundiendo el proyecto de reforma que hoy, a ojos de la MANE, se revive con el “Acuerdo por lo superior 2034”.
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