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Por: Camila Ramírez – agosto 13 de 2011

Organizaciones campesinas, indígenas y afrodescendientes provenientes de Antioquia, Bogotá, Cauca, Nariño, Nordeste Antioqueño, Meta, Putumayo, Caquetá, Santander, Sumpaz y Tolima, entre otras regiones, arribaron entre el 11 y el 12 de agosto a Barrancabermeja (Santander), ciudad donde se lleva a cabo el Encuentro Nacional de Comunidades Campesinas y Afrodescencienres por la Tierra y la Paz, y al que asisten 20.000 personas aproximadamente. Durante cuatro días, los participantes discutirán sobre las experiencias y alternativas que desde estas regiones se han logrado en medio del conflicto armado.

El encuentro se inició el viernes 12 de agosto con una comparsa que recorrió el puerto petrolero, desde la Villa Olímpica hacia la Plaza ‘Camilo Torres’, donde representantes de las organizaciones indígenas, afrodescendientes y campesinas participantes, junto con el alcalde de Barrancabermeja, Carlos Contreras, y monseñor Camilo Castrillón, dieron lectura a un pronunciamiento en el que se comprometen con la búsqueda de procesos de paz en Colombia.

Feliciano Valencia, integrante del Consejo Regional Indígena del Cauca (CRIC), aseguró en su intervención que “la sociedad colombiana necesita hacer hechos de paz ya”. Además, exigió al gobierno “desmontar ese aparato de crimen que está dentro de las Fuerzas Armadas, si quiere que sus oponentes crean en esa disposición para buscar una salida negociada al conflicto armado”.

La problemática de la tierra, sin duda, ocupará un espacio central en las deliberaciones del Encuentro Nacional de Paz. Mauricio Ramos, miembro de la Asociación Campesina del Valle del Rio Cimitarra (ACVC), aseguró que el conflicto históricamente en Colombia está relacionado a la problemática de la tierra: “las razones del conflicto por la tierra no han cambiado, no se puede hablar de la posibilidad de alcanzar la paz entre los colombianos si no se resuelve el problema de la tierra”.

Respecto a la restitución de tierras a las víctimas y el proyecto de ley rural anunciados por el gobierno, Ramos señaló que “no se puede entregar la tierra al campesino si no se establece una política agraria que le brinde garantías para trabajar la tierra, un sistema de mercadeo, un sistema de producción, un sistema de garantías en el campo que le permitan vivir al campesinado en condiciones dignas”. En este mismo sentido, el representante a la cámara Iván Cepeda aseguró que “las organizaciones campesinas, indigenas y afrodescendientes deben construir una gran red para lograr una reforma agraria integral”.

El Encuentro Nacional de Paz continuará sesionando hasta el próximo domingo 14 de agosto, luego de lo cual las organizaciones sociales participantes emprenderán el regreso hacia sus regiones, donde esperan posibilitar escenarios de diálogo regional y exigir gestos claros de voluntad política de parte de gobierno y guerrilas.

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