Por: Christian Peñuela – julio 13 de 2015
El pasado 19 de junio se llevó a cabo el Festival Antimili Sonoro 2015 con el lema “nos la jugamos por la alternativa al servicio militar”.
Son tres años de existencia de este festival autogestionado, en el que diferentes colectivos antimilitaristas, agrupaciones musicales y organizaciones artísticas reivindican la objeción de conciencia frente al servicio militar en la ciudad de Bogotá.
El evento fue organizado por el Proceso Distrital de Objeción de Conciencia como el Colectivo de Investigación La Tulpa, la Acción Colectiva de Objetores y Objetoras de Conciencia (ACOOC), el Tejido Juvenil Tejuntas del Congreso de los Pueblos, la Asociación Nacional de Estudiantes de Secundaria (Andes), entre otros.
En esta ocasión, de acuerdo con los organizadores, a la plaza de Bolívar de la capital asistieron más de 3.500 personas que, a pesar de las dificultades derivadas de incumplimientos de parte de la Administración Distrital, disfrutaron de las presentaciones de agrupaciones musicales como La Severa Matacera, Sistema Sonoro Skartel, Frankie ha Muerto, La Gleba, SeverOreveS, Los Vizocios, La Procedencia, Mackia, Che Guerrero, Some Noise, Arenga, Rehén, Ministerio de Vagancia y Polikarpa y sus Viciosas, ésta última una histórica banda de punk rock de la capital que fue acompañada por el colectivo de Madres de Soacha y sus denuncias sobre la responsabilidad de la Fuerza Pública en innumerables crímenes de Estado. De igual forma, se presentó un performance a cargo de la Fundación Tejidos del Viento, donde se homenajeó a las víctimas de desaparición forzada en el país.
Adicionalmente, durante el festival se rechazó la militarización de la vida cotidiana de los colombianos, la impunidad frente a los crímenes de Estado que permitiría la ampliación al fuero penal militar y los abusos de autoridad y violaciones a los derechos individuales que permitiría la reforma al Código de Policía. También se reclamó el cese al fuego bilateral entre la guerrilla de las FARC-EP y el Gobierno Nacional.
Asimismo, el Proceso Distrital de Objeción de Conciencia anunció en el Antimili Sonoro 2015 que sigue trabajando en un proyecto de ley para que el servicio militar obligatorio sea reemplazado por un servicio social para la paz y que seguirá convocando a diferentes sectores sociales para que participen en su construcción.
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