Por: Alberto Mendoza Morales – diciembre 12 de 2011
Emergió pungente, solitaria y soberana de las profundidades del mar Caribe. Constituye un volumen montañoso independiente del sistema andino. Se eleva al occidente de la serranía de Valledupar, pertenece a tres departamentos –Cesar, Magdalena, Guajira– y, junto con la serranía de La Macarena, es la montaña aislada más alta del mundo. Es un hecho notable de la geografía colombiana.
Las pirámides egipcias tienen base cuadrangular. La Sierra Nevada, pirámide natural, tiene base triangular. Sus lados miden entre 160 y 180 km de longitud. Los indígenas dicen que la montaña se originó ‘después de que terminaron de crecer las planicies alrededor, ahí mismo se elevaron los picos de la sierra, formaron el ombligo del mundo’.
La Sierra, enhiesta y desafiante, culmina en dos picos gemelos, Bolívar y Colón, que ostentan la mayor altura del país: 5.770 metros sobre el nivel del mar. El clima, en su ascenso, pasa de ecuatorial a polar. La Organización de las Naciones Unidas para la Cultura y la Ciencia (Unesco) la declaró “Reserva del Hombre y la Biosfera”.
Es la principal estrella fluvial de Colombia. En sus costados nacen y fluyen más de cuarenta ríos y quebradas, entre ellos: Camarones, Cesar, Dibulla, Fundación y Palomino, que corren hacia el norte; Orihuela, Riofrío, Aracataca, Tucurinca, Fundación y Ariguaní, hacia el occidente; Ranchería y Badillo, hacia el oriente; y, hacia el sur, el Cesar, con su afluente el Guatapurí, río consentido de Valledupar que desemboca en la ciénaga de Zapatosa, la más extensa del país.
En la Sierra vivieron los Taironas. Fueron diezmados por los españoles. Tuvieron a Pocigüeyca como capital. Hoy ocupan la Sierra los descendientes de antiguos pueblos. Arhuacos, kankuamos, wiwas y arzarios, culturas que ‘sostienen el mundo’ y se muestran firmes entre los ‘blancos’, sus ‘hermanos menores’. Se hacen sentir. La población distingue al mamo: sabio, maestro y guía espiritual. Su mensaje es ‘respetar y proteger la naturaleza y el medio ambiente, que es lo que nos da realmente una fuente de vida’. Existe Teyuna, Ciudad Perdida de los Tayrona, ubicada en la cuenca alta del río Buritaca a 80 km de Santa Marta, que muestra ingeniería y arquitectura trabajadas en piedra, y que es un monumento nacional.
La Sierra ha sido profanada, deforestada, sus pobladores agredidos por narcotraficantes, paramilitares, guerrilleros y militares. Algo por hacer con la Sierra es el reconocer y respetar su presencia propia e integral. Para ello, se hace necesario separarla administrativamente de los tres departamentos a que pertenece actualmente, aceptarla como notable unidad geográfica de Colombia, darle el carácter de distrito de manejo especial y designarle administración propia y autónoma.
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La nota es un buen referente de este lugar tan valioso para los colombianos, sin embargo, sería importante al análisis final agregar que está es una zona estrátegica en términos de biodiversidad y de turismo, donde grandes capitalistas se han apropiado de ellas, no gratis tuvimos a la señorita Bessudo de la ministra de ministra (dueños de Aviatur).