Por: Camila Ramirez – enero 21 de 2012
La finalización del contrato laboral del que vivían 380 familias del corregimiento El Centro de Barrancabermeja (Santander), el pasado 31 de diciembre, ocasionó diez días de paro cívico. La protesta se realizó contra Ecopetrol, OXY de Colombia y Estrella Petrolera SAS, y en esta participaron unas 5.000 personas, de las cuales 3.000 son trabajadores. La protesta pacífica fue duramente reprimida por el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía Nacional y sólo la presión de los trabajadores de la Unión Sindical Obrera (USO) y las comunidades agrupadas en la Asociación de Juntas de Acción Comunal (Asojuntas) puso a la estatal petrolera, a la Alcaldía de Barrancabermeja y a la Gobernación de Santander a negociar un acuerdo básico, en una reunión sostenida el pasado 20 de enero, de cuyo cumplimiento depende que no se reanuden las movilizaciones.
El pasado martes 10 de enero, trabajadores de empresas contratistas al servicio de Ecopetrol iniciaron el paro cívico, exigiendo vinculación laboral directa para los habitantes de la región y 31 veredas del corregimiento El Centro se unieron a la protesta para reclamarle a Ecopetrol el servicio de agua potable y gas domiciliario, como inversión social por la explotación petrolera. Ese mismo día, en horas de la tarde, los obreros decidieron bloquear la vía que comunica el corregimiento con el campo petrolero, sector conocido como Campo 5.
Al lugar llegó también el Esmad y, según denuncas de los habitantes, arremetió contra a la comunidad con gases lacrimógenos en lugares como la plaza de mercado del lugar, donde se econtraban varios niños y algunas personas resultaron heridas por golpes en la cabeza, los brazos y las piernas. Siete personas fueron detenidas. Por su parte, el capitán Marco Mejía, comandante del Distrito I de la Policía y quien está encargado de las operaciones en la zona, ha afirmado que se tomarán las medidas necesarias para controlar el corregimiento.
Días después del inicio del paro, el 16 de enero, habitantes y trabajadores de El Centro realizaron una movilización hacia el Palacio Municipal de Barrancabermeja para allí hacer públicas las denuncias, pero la solicitud del permiso para ingresar al casco urbano no fue aprobada por la Alcaldía. La comunidad regresó, entonces, al corregimiento y allí se congregó en horas de la tarde. A las 5:30 pm un grupo de trabajadores fue a invitar al punto de concentración a los obreros que fueron obligados a trabajar por la empresa contratista y, en ese momento, el Esmad atacó a los manifestantes.
Libardo Hernández, dirigente de la USO, denunció que los hechos del lunes fueron una provocación por parte del Esmad y afirmó que “arrasaron con toda la comunidad, ingresaron a las casas de los habitantes buscando personas e, inclusive, se escucharon tiros. Agentes de la policía y la Sijín se encontraban en las protestas, estos hechos se dieron hasta la madrugada”. Ese día y durante la noche, un centenar de personas fueron heridas y 10 están detenidas y posiblemente serán judicializadas.
Según las directivas de Ecopetrol, durante la protesta se realizaron amenazas a un grupo de trabajadores de empresas contratistas, se causaron daños la infraestructura y se realizó obstrucción ilegal de las vías públicas. Al respecto, Libardo Hernández, afirmó que “Ecopetrol ha intentado cambiar el carácter de esto, insistiendo en que algunos contratistas han sido amenazados y que tienen pruebas ante la Fiscalía, pero esto no es cierto”.
La Cira Infantas
Con la finalización del contrato, la comunidad está preocupada porque no se sabe qué va a pasar con la mano de obra local y el desarrollo urbano del corregimiento. Ecopetrol ha manifestado que en el proyecto La Cira Infantas se estableció un acuerdo con la empresa Estrella Petrolera SAS para desarrollar operaciones de subsuelo en dos contratos que tenían como fecha de finalización el pasado 31 de diciembre de 2011 y que las empresas contratistas estaban enteradas. De igual manera, las directivas de la estatal petrolera han informado que “las personas de la región podrán participar en los procesos de vinculación de personal que se generen con el nuevo contrato, en concordancia con nuestra política de Responsabilidad Social Empresarial”. Sin embargo, los habitantes del corregimiento manifestaron que el paro se mantendrá hasta que se logre una mesa de negociación sobre este punto.
El campo La Cira Infantas fue descubierto a principios del siglo XX. Ecopetrol y la multinacional norteamericana OXY realizan hoy la explotación de crudo con una producción aproximada de 32.000 barriles diarios. Con el paro cívico las labores se detuvieron en cien pozos petroleros y se afectó la producción de 76 de los 97 contratos de Ecopetrol. El superintendente de operaciones del campo La Cira Infantas, Orlando Mauricio Sánchez, informó en un comunicado que “bajo vías de vandalismo y amenazas a trabajadores, Ecopetrol no desarrollará diálogo con estas personas. Si levantan el paro y regresan a labores nos sentaremos a dialogar, cosa que siempre ha sido intención de la empresa”. De otra parte, Libardo Hernández afirmó que Sánchez llegó a expresar que no sabía las razones de la protesta y que pretendió ignorar así los reclamos de la comunidad y los trabajadores. Además, manifestó que “como dirigente de la USO, el 26 de diciembre lo llamé, le explique que la reliquidación o cancelación del contrato iba a traer unas consecuencias. Nos parece que Ecopetrol no es claro en sus intervenciones y comunicación hacia la comunidad”.
Las exigencias
Los habitantes del corregimiento El Centro, además de buscar una mesa de negociación para tratar el tema de la estabilidad laboral para los habitantes del corregimiento, le exigían a Ecopetrol el cumplimiento de los acuerdos suscritos para la instalación de gas domiciliario y agua potable. La comunidad denuncia que, luego de la inauguración del sistema de gas hecho por la estatal petrolera, aún no reciben el servicio y manifestaron que sólo reciben agua potable uno de cada tres días porque este recurso es utilizado por Ecopetrol en sus operaciones.
Hernández asegura que la comunidad viene pagando los servicios públicos de gas y agua, pero no los reciben. “Aquí hay una problemática laboral y social: en lo laboral sucede que le están quitando la participación a la mano de obra local y en lo social que las comunidades están padeciendo unas problemáticas debido al mal manejo de la explotación”, manifestó.
Ecopetrol ha señalado al respecto que construyó la red de gas domiciliario en alianza con la Alcaldía de Barrancabermeja y la Gobernación de Santander, pero que estas obras fueron entregadas a la ESP Llanogas Ltda., quienes son los encargados de este servicio. Frente al caso del agua han comunicado que el agua potable es independiente del sistema de inyección hacia los pozos petroleros y que la Alcaldía, en una reunión, se comprometió a asignar recursos para la optimización de este servicio.
Los habitantes y trabajadores de El Centro esperan el cumplimiento de las acciones prometidas por la Alcaldía de Barrancabermeja y Ecopetrol, luego de la reunión realizada el viernes 20 en la tarde para solucionar la situación, de manera que no deban retomar el paro cívico. Por su parte, ese mismo día, más de mil trabajadores de Puerto Wilches iniciaron tambień un paro cívico para exigir a la empresa de petróleos colombiana el cumplimiento de los acuerdos pactados respecto a la participación laboral de los habitantes de la zona, la contratación directa e inversión social para las comunidades.
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